Hola amigos.
Hoy, aprovechando que Belén ha salido con los niños y estoy solo en casa...
Pues lo dicho, que en estas ocasiones suelo aprovechar para fumigar, por eso de que los niños son imprevisibles y la única forma de asegurarme que no tocarán nada es amarrarlos a la pata de la mesa. Pero bueno, empezamos por el principio.
Hacía ya muchos días que tenia que regar, el invernadero tenía ya un aspecto desértico y estaba desaprovechando estas temperaturas agradables para obtener un crecimiento adecuado.
Por eso he regado todo el invernadero, como tampoco tengo demasiado tiempo lo he regado por aspersión.
Lo siguiente es aprovechar las circunstancias favorables y fumigar contra alguna de las plagas que últimamente me acompañan en el inverndaro. En este caso varios tipos de cochinilla.
Concretamente cochinillas de raíz posiblemente en algunas plantas, aunque no lo he verificado, cochinilla algodonosa en las agavaceas pequeñas que tengo dentro del invernadero, cochinillas de las grandes que suelen pulular por mi jardín comiéndose algunas plantas y serpetas en el limonero y en una yuca.
Para ir alternando los venenos en esta ocasión he elegido el dimetoato, muy potente y de fácil dispersión dentro de la tierra humeda. He usado una concentración de 1,2 CC/L con un gasto elevado, 1L para el invernadero y otros 3 para el arriate de delante, el lateral y el limonero, lo que supone empapar suficientemente las plantas.
Dentro de unos días tomaré muestras, si me acuerdo, de las distintas plagas para ver el grado de eficacia obtenida con los tratamiento aplicados.
Hasta pronto.