Qué preciosidades y la estupenda foto de la Glottiphyllum con el Díptero (es del mismo orden de las moscas, aunque os parezca una avispa...eso es lo que pretende). Enhorabuena.
H. Bates observó que en ocasiones una especie inofensiva se asemejaba a otra peligrosa o repugnante y que con esto conseguía eludir la acción de los depredadores. Se llama mimetismo batesiano a este fenómeno. Es el que observamos, por ejemplo, en el caso de las moscas (de las familias Syrphidae y Bombilidae) cuyo aspecto emula el de abejas y avispas.
Son unas caraduras!!! utilizando el trabajo evolutivo de otras especies que han desarrollado defensas eficientes (venenos, etc), para que no se las coman los predadores.
También ocurre con una especie de serpiente que se parece a la famosa serpiente coral de colores rojo negro y blanco, o con sapos venenosos...