Antes que nada, el viaje lo hicimos en dos grupos, nosotros llevábamos un monovolumen sin la última fila de asientos, y que volvió lleno de cactus. José María, Paco, Mary y Mary Lola iban en otro coche un poco distanciados

Primera parada, en Figueras, muy cerquita de la frontera francesa.


Encontramos un restaurante con un patio al aire libre, donde cenamos y repusimos fuerzas para el día siguiente.

Listos para continuar la marcha, eran las 06.00 horas y había que llegar a Brujas antes de la cena, y allí cenan a las 18.30 horas.

Y lo conseguimos, Angeles en la puerta del hotel en Brujas, más que un hotel, es una casa particular adaptada, pero con habitaciones muy confortables y un desayuno estupendo al día siguiente.

Ya reunidos los dos grupos, nos fuimos a dar una vueltecita por Brujas, una ciudad encantadora y muy monumental.

Y a mediodía ya estábamos de lleno en la jungla de cactus.

Muy cansados, pero contentos de estar allí.

El Mar del Norte, a tan solo 50m. del hotel.

Las cuatro "Marujillas" que, como es normal, se fueron de compras.
La semana próxima habrá bastantes más, cuando el resto de la expedición me envíen las suyas, también pondré algunas de las plantas que traje para la colección.
Saludos